Las "nubes preñadas" en la tradición meteorognómica de la India

 

Por José Luis Pascual Blázquez

 

Ponencia expuesta en el Congreso de Cabañuelas y Astrometeorología

en Almagro (Ciudad Real), en octubre de 2009

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         En las economías basadas en la agricultura y la ganadería, sobre todo con nomadeo o trashumancia, así como en las de pura supervivencia, el impacto que posee el régimen de lluvias no necesita ser exagerado; allá donde vayamos, no importa a qué parte de nuestro planeta, encontramos siempre, en todas las culturas, medios para conocer de antemano la clase de año que va a hacer, seco o lluvioso, con aguas adelantadas o retrasadas, abundantes o escasas, qué tipo de viento va a predominar, etc.

         Del siglo VI de nuestra Era (la datación no está muy clara pero parece que esta época podría ser fiable), tenemos un texto escrito en sánscrito, el Brhatsamhita de Varahamihira, que podría ser considerado como una obra troncal en la Historia de la Meteorología, tanto de la India como en general. Decimos esto porque abunda en referencias a otros autores que escribieron antes que él en materia meteorológica; entre ellos, Garga, Parasara, Vajra, Kasyapa, Badarayana, Asita-devala, y otros, cuyas obras, salvo excepciones, ya están perdidas para nosotros (apenas quedan algunos fragmentos de Gargisamhita). Bhattotpala, uno de sus comentadores, cita además a Siddhasena; igualmente, este autor da referencias de otras obras escritas sobre agricultura que dedican gran atención a la previsión de la lluvia futura.     

         El Brhatsamhita, que posee su grupo de comentadores posteriores (lo que nos da idea de la importancia que llegó a alcanzar), no es más que la culminación escrita de una clase de conocimiento que, previamente, se hallaba en pleno uso como tradición oral; este proceso de compilación suele producirse cuando de las sociedades rurales nacen importantes concentraciones urbanas. Del mismo modo vemos pasar a la letra las tradiciones árabes, cuando los nómadas se agruparon en ciudades e iniciaron su expansión por el Norte de África hacia Europa (los gramáticos se apresuraron a guardar la tradición oral en sus libros, igual que nosotros hemos hecho con los refraneros en el siglo XX como respuesta a la extinción de la vida rural).

         La parte del Brhatsamhita que trata de un modo más exhaustivo la previsión de la lluvia son los capítulos         XXI a XXVIII. De acuerdo con las creencias que circulaban durante la época en que fue escrita esta obra, y sin duda en tiempos muy anteriores, el proceso de formación de las "nubes" empezaba seis meses antes de que éstas trajeran la lluvia; por ejemplo, las nubes que "conciben" en otoño-invierno dan a luz la lluvia 195 días después (seis meses lunares y medio, no olvidemos que en la India impera aún la cronología lunar).

         Por "nube" hemos de entender el tipo de régimen atmosférico que se da durante determinado período de tiempo (las lunas nuevas o llenas, el paso de la Luna por determinados asterismos, los ortos y ocasos de los asterismos, etc.), no el sentido literal, ya que las sucesivas traducciones han velado el original.

         La creencia se remonta por lo menos a los tiempos en que fue escrito el Rig Veda, puesto que en I.6-4 contiene una referencia a la formación de "embriones de lluvia"; pero de nuevo podemos asumir que, entonces, el conocimiento que se transmitía de padres hijos oralmente fue compilado, al menos en parte, a lo largo de este escrito.

         Quienes trataron el tema de la predicción de las precipitaciones difieren ampliamente sobre en qué momentos tiene lugar la formación de los embriones de la lluvia; algunos (Siddhasena, citado por Uptala) admitían que las nubes empiezan a concebir después de la mitad brillante (luna creciente) del mes de Karttika (octubre-noviembre). Tal vez encontremos aquí el origen (o la equivalencia) del dicho castellano la luna de octubre siete lunas cubre.

         Sin embargo, este no era el punto de vista predominante; Garga, Vasistha, Parasara, Rsiputra y Kasyapa apuntaban que la fecundación de las nubes podía detectarse a partir del primer día de la mitad brillante de Margasirsa y siguientes (noviembre- diciembre), cuando la Luna recorre Purvasadha. Los fetos así formados "paren" la lluvia 195 días más tarde (seis meses y medio), cuando la Luna se halle en el mismo asterismo en el que tuvo lugar la concepción (estamos tratando con tithi, o sea, días lunares, no lo olvidemos, y con una cronología absolutamente lunar).

         Fijémonos que el sistema es observacional y de referencia estelar; aunque la precesión de los equinoccios vaya desplazando el Zodíaco estelar respecto al de los signos (fijo), el sistema podría ser usado en la actualidad, lo único que variaría sería el asterismo de referencia. Estamos por tanto ante una astrología puramente lunar y estelar, que aún sigue vigente en nuestros días a lo largo de la India.

         Con arreglo a este sistema, las "nubes" formadas en la mitad brillante del mes (nuestra luna nueva o creciente) hacen llover en la mitad oscura (nuestra luna vieja) y al contrario; las que se forman durante el día dan fruto por la noche, y al revés; las que conciben al amanecer traen la lluvia al atardecer y viceversa; las que se forman hacia el Este derraman su lluvia en el Oeste, y al contrario, e igualmente con otros parámetros similares.

         Las nubes que conciben en el inicio de Margasirsa y en la mitad brillante del mes de Pausa (diciembre-enero) proporcionan escasa lluvia. El siguiente cuadro muestra los meses y quincenas de la formación de embriones de lluvia, así como los momentos en que su lluvia es derramada (Brhatsamita XXI 9-12):

         Concepción                            Lluvias

Pausa krsna (XII-I)                 Sravana sukla (mitad brillante) VII-VIII

Magha sukla (I-II)                   Sravana krsna (VII-VIII)

Magha krsna (I-II)                  Bhadrapada sukla (VIII-IX)

Phalguna sukla (II-III)            Bhadrapada krsna (VIII-IX)

Phalguna krsna (II-III)           Asvina sukla (IX-X)

Caitra sukla (III-IV)                Asvina krsna (IX-X)

Caitra krsna (III-IV)               Karttika sukla (X-XI)

         Ahora bien, ¿cómo distinguir los signos de la lluvia? ¿Cómo saber si los embriones generados van a resultar en buenas lluvias o no? He aquí los auspicios anunciadores de que los fetos de las lluvias van a estar bien nutridos:

         Vientos suaves y agradables del Norte, NE. y Este; cielo limpio; Sol y Luna cubiertos de un halo satinado, brillante y espeso; cielo encapotado de nubes grandes y densas, lisas, con formas de agujas o afiladas y rojas, negras o azules, así como Luna y estrellas brillantes; mañana o atardecer acompañados de Arco Iris, retumbar de truenos, relámpagos y aparición de parhelios; pájaros y animales que emiten sonidos agradables desde el Norte, el Nordeste y Este; planetas grandes de rayos suaves y no dañados moviéndose en orden pradaksina (al Norte del asterismo); árboles con sus retoños sanos (sin daños); hombres y cuadrúpedos felices (BS XXI, 14-18).

         Las nubes que aparentan perlas o plata, o recuerdan al tabaco, a los lotos y a los colirios, con forma de animales acuáticos, anuncian abundante lluvia; las nubes abrasadas por intensos rayos de Sol y acompañadas por suave brisa derraman el agua con exceso en el tiempo del "nacimiento".

 

         Síntomas que aparecen en meses concretos y tienden a nutrir los embriones de la lluvia

         Margasirsa (noviembre-diciembre): ausencia de fríos severos. Horizonte brillante y rojo por la mañana y nubes acompañadas de halos.

         Pausa (diciembre-enero): ausencia de escarchas fuertes.

         Magha (enero-febrero): vientos fuertes, Sol y Luna con su luz oscurecida por la escarcha, demasiada frialdad, aparición de nubes a la salida y a la puesta de Sol.

         Phalguna (febrero-marzo): vendaval áspero y violento, nubes satinadas y flotantes, halos incompletos alrededor del Sol y de la Luna, Sol con aspecto cobrizo o de color ámbar.

         Caitra (marzo-abril): viento, nubes, lluvia y halos.

         Vaisakha (abril-mayo): nubes, viento, lluvia, relámpagos y truenos.

 

         Signos indicadores del aborto de los embriones de la lluvia y que tienden a destruir las posibilidades anunciadas previamente

         Ausencia de meteoros, relámpagos, tormentas de polvo, estaciones (cuadrantes del año) ardientes, terremotos, nubes con apariencia de ciudades, cometas, conflictos planetarios, truenos, señales de sangre, aceite, etc. en el agua de lluvia, Arco Iris y aparición de Rahu (astronómicamente el Nodo Norte de la Luna, pero también el demonio causante de los eclipses, hijo de Simhika, esposa del sabio Kasyapa) y también de los otros tres portentos, a saber, celestiales, atmosféricos y terrestres (BS XXI, 25-26).

         Uptala afirma que si alguno de estos fenómenos aparece inmediatamente después de la formación de los embriones de la lluvia, hay pocas probabilidades de precipitaciones (BS XXI, 26). Además, los signos contrarios de aquellos generales y de los fenómenos especiales indicadores de lluvia, descritos anteriormente, minimizan las probabilidades de ésta.

         Los fetos de nubes formados en cualquiera de los meses que van de Margasirsa (noviembre-diciembre) a Vaisakha (abril-mayo), cuando la Luna entra en uno de los cinco asterismos (o sea, Purva -y Uttara-Bhadrapada, Purva-, Uttarasadha y Rohini), dan lluvia abundante; un embrión formado en cualquier mes en los asterismos Satabhisaj o Aslesa, Arra o Svati, o Magha, se desarrolla y hace llover durante muchos días, mientras que los fetos destruidos por los portentos celestiales, atmosféricos y terrestres, indican ausencia de lluvia durante muchos días; los de Pausa (diciembre-enero) durante 6 días; los de Magha (enero-febrero) durante 16 días; los de Phalguna (febrero-marzo) durante 24 días; los de Caitra (marzo-abril) durante 20 días; y los de Visakha (abril-mayo) durante sólo 3 días.

         Se observará que algunos nombres de los asterismos no coinciden con la lista de los actuales, a causa de las transformaciones idiomáticas causadas por el paso del tiempo, lo cual dificulta nuestra comprensión y la interpretación del texto fuente, algo frecuente cuando viajamos hacia el pasado.

         Un embrión de lluvia acompañado por los "cinco concomitantes", es decir, el viento, el agua, los relámpagos, truenos y las nubes, hace llover profusamente sobre una extensión de 100 yojanas; los que vienen con cuatro fenómenos sobre 50 yojanas; los que traen sólo tres fenómenos hacen llover sobre un área de 25 yojanas; el que viene acompañado por dos sobre 12 yojanas. Pero mucha lluvia en el tiempo de la concepción tiende a su destrucción (BS XXI, 34) y produce sólo una llovizna cuando llega el momento de "parir" (BS XXI, 37). Si, finalmente, un embrión de lluvia completamente desarrollado no descarga cuando es tiempo de hacerlo, es decir, al cabo de 195 días, dará granizo en el momento de la segunda concepción.

         Los cuatro días siguientes al octavo de la mitad brillante de Jyestha (abril-junio) se contemplan como "los servidores del viento", y los que vienen con viento suave del Norte, Sur o Este, así como con nubes brillantes, favorecen buenas lluvias; una lluvia durante el mismo mes y quincena (Jyestha suka) en los cuatro asterismos, es decir, Svati, Visakha, Anuradha y Jyestha indica ausencia de lluvia en Sravana (julio-agosto), Bhadrapada (agosto-septiembre), Asvayuga (septiembre-octubre) y Karttika (octubre-noviembre) respectivamente (BS XXII, 1.3).

         De acuerdo con Kautilya una previsión de cantidad de lluvia podría ser realizada observando la posición, movimiento y embarazo de Júpiter, la salida, puesta y movimiento de Venus, y el aspecto natural o anormal del Sol (Arthasastra, 24.7.8).

 

         Medios para averiguar la cantidad de la lluvia futura

         La estimación de la cantidad de la lluvia futura era llevada a cabo por medio de la observación atenta del viento a través de una bandera negra de 4 cubitos de largo (unos 45 cm cada uno), colocada en un mástil de 12 cubitos de alto durante el tiempo de la conjunción de la Luna con Rohini (naksatra o mansión de las Pléyades). Para este fin se observaban cuatro velas o guardias durante el día (períodos de tres horas), las cuales se consideraban representativas de cuatro meses, empezando con Sravana (julio-agosto), respectivamente; y sus partes correspondían a los días dentro de sus respectivos meses. Caso de que el viento viniera simultáneamente de dos direcciones, el que mostraba mayor firmeza es el que debía ser tenido en cuenta. El Krsi-Parasara (verso 34) también prescribe el uso de una bandera para la determinación de la dirección del viento. 

         El color, tamaño, etc. de las nubes era también cuidadosamente observado, y sus rasgos descritos ampliamente (BS XXIV, 12-25). Observaciones similares de la conjunción de la Luna con el asterismo Svati se llevaban a cabo en la mitad brillante del mes de Asadha (mayo-junio): una lluvia durante la 1ª vela indicaba la abundancia de todas las cosechas, en la 2ª de sésamo, grama verde y negra, y si caía en la 3ª vela de la noche de la cosecha de verano. Igualmente, la lluvia en la 1ª vela del día anunciaba buena lluvia, durante la 2ª lluvia acompañada de insectos y reptiles, durante la 3ª parte lluvia moderada, y si llovía durante el día completo indicaba lluvias oportunas. Si había caída de nieve, vientos fuertes y veloces, truenos continuos y relampagueos en la conjunción de la Luna con Svati durante el 7º día de la mitad oscura de Magha, debían esperarse buenas lluvias y abundantes cosechas.

         El Krsi-Parasara aporta normas detalladas para determinar el regente y el ministro del año en cuestión, así como su influencia en la lluvia y el clima, implicando elementos recurrentes en la astrología árabe y medieval y renacentista europea posteriores.

         Un método interesante para determinar la cantidad de lluvia durante el año entero por venir se encuentra en este mismo texto: el mes entero de Pausa (diciembre-enero) se dividía en 12 partes iguales, cada una de dos días y medio, que representaban los 12 meses del año empezando por Pausa. La dirección del viento determinada por medio de una bandera durante estas 12 partes de Pausa predecía la lluvia en los meses representados por esas partes. El viento que venía del Norte o del Oeste en cualquiera de ellas indicaba buenas lluvias durante los meses así representados, mientras que los vientos del Este o del Sur predecían la escasez de la lluvia; si, por otra parte, el viento no soplaba de una dirección definida, no llovería en absoluto, mientras que el viento que soplaba al azar indicaba lluvias irregulares. Cada cinco dandas (24 minutos) de Pausa (es decir, dos horas) correspondía a un día del mes. La lluvia en la primera mitad de estos 5 períodos-danda indicaba precipitaciones durante el día, mientras que en su última mitad predecía lluvia durante la noche; y así sucesivamente (versos 12-23, 31-34). Un chaparrón tormentoso acompañado de truenos y relámpagos en el 7º día de la mitad brillante de Magha (enero-febrero) y Phalguna (febrero-marzo) o en el tercer día de la luna llena en Caitra (marzo-abril) o Vaisakha (abril-mayo) mostraba buena lluvia y abundantes cosechas durante ese año (versos 39-40).

         Según otro curioso método, en la primera noche de la mitad brillante de Vaisakha (abril-mayo) se escribía las palabras "haya éxito" en una pértiga 200 veces; a continuación había que colocarla vertical en el lecho de un río, sumergiéndola en el agua hasta la marca escrita; a la mañana siguiente se observaba el nivel del agua. Si estaba igual indicaba que la lluvia que iba a caer ese año sería similar a la del anterior; si el nivel del agua subía o bajaba indicaba mayor o menor lluvia que el año precedente, respectivamente; si el nivel del agua sobresalía por encima de la parte escrita de la varilla anunciaba doble cantidad de lluvia e inundación (versos 45-49).

         La dirección del viento en el día de la luna llena de Asadha era observada atentamente para determinar la naturaleza de la lluvia futura (versos 56-57). Un chubasco o su ausencia en el 7º día de la mitad brillante de Asadha indicaba buena lluvia o sequía a lo largo del año (verso 38).

 

     Las mansiones lunares (nakshatras)

         Antes de entrar a estudiar algunos elementos de la antigua meteorología india que han conseguido llegar hasta nosotros, debemos exponer una de las particularidades del sistema astronómico allí empleado, el de las mansiones lunares; también era utilizado en China, y fue traído por los árabes a la Europa medieval. Tiene particular interés por pertenecer a la cronología lunar (paleolítica), muy anterior a la solar (neolítica y actual).

         La Luna fue el primer computador natural utilizado por la humanidad para orientarse en el tiempo (época paleolítica, tiempos de caza y recolección); los bisontes de Altamira están siendo interpretados actualmente como un zodíaco lunar, por ejemplo. Y es en esta perspectiva que debemos considerar los nakshatras de la astrología india, como un resto de la época de la cronología lunar paleolítica.

         Cada noche la Luna puede ser divisada sobre un determinado conjunto de estrellas (asterismo) del cinturón zodiacal; a la noche siguiente habrá abandonado esas estrellas, avanzando hacia la izquierda del observador, de modo que ahora "reside" o "se ha posado" sobre un asterismo diferente. Lo mismo sucederá en noches sucesivas, de modo que en 27 noches consecutivas habrá dado una vuelta completa y a la vigésimoctava se la podrá divisar muy próxima a la posición inicialmente considerada (el período sideral de la Luna es ahora de 27 días 7 horas 43 minutos y 4,7 segundos).

         La referencia más importante de todos estos asterismos es su primera aparición tras la luna nueva, justo en el ocaso solar, muy próxima al horizonte occidental (la neomenia griega -nuevo mes-, el primer día del mes lunar, un momento importante de todas las religiones antiguas, de carácter astral).

         Otro elemento característico de la astrología india es el concepto de "día lunar" o tithi, tiempo en que la Luna tarda en recorrer 12° (1/30 del círculo); empezando por la luna nueva, un tithi se completa cuando la Luna ha rebasado al Sol 12° en el Zodíaco. Este es el primer tithi, de modo que al llegar a la luna llena han debido transcurrir 15 tithis; y otros tantos quedan hasta la siguiente luna nueva, completando así los 30 días lunares en un ciclo solilunar indio (equivalentes a 29,5 días solares nuestros). Por tanto, dado que la Luna se acelera y decelera a lo largo de este ciclo, el promedio de un tithi es aproximadamente de 23,62 horas de nuestro día solar.

         El ciclo de las fases queda determinado por la luna nueva (Amavasya) y la luna llena (Poornina); ambos puntos críticos dividen en dos mitades de 15 tithis el ciclo completo: la  mitad oscura o Krishna Paksha (equivalente a la luna vieja o menguante) y la mitad brillante Shukla Paksha (nuestra luna creciente).

         Tanto el tithi como los nakshatras o mansiones lunares están aún en plena vigencia en la India actual; y no son usados solamente por los astrólogos, sino que se hallan imbricados en la religión, ritos y celebración de festividades de enorme trascendencia popular.

         Para mejor comprensión posterior de la peculiar visión de la antigua meteorología india, damos a continuación la relación de  nakshatras:

Nakshatra                     Posición zodiacal                           

 1. Aswini                     0°-13°20´ Aries (Aries)

 2. Bharani                    13°20´ - 26°40 Aries (Triángulo)

 3. Krittika                     26°40 Aries-10° Tauro (Pléyades)

 4. Rohini                      10° Tauro-23°20 Tauro (Aldebarán)

 5. Mrigsira                   23°20 Tauro-6°40´ Géminis (Orión)

 6. Ardra                       6°40´ Géminis-20° Géminis (Betelgueuse)

 7. Punarvasu                20° Géminis-3°20´ Cáncer (Pollux)

 8. Pushya                     3°20´ Cáncer-16°40´ Cáncer (Castor)

 9. Aslesha                     16°40´ Cáncer-0° Leo (Hydra)

10. Magha                    0° Leo-13°20´ Leo (Regulus)

11. Purvaphalguni         13°20´ Leo-26°40´ Leo (Zosma)       

12. Uttraphalguni          26°40´ Leo-10° Virgo (Denebola)

13. Hasta                       10° Virgo-23°20´ Virgo (Cuervo)

14. Citra                        23°20´ Virgo-6°40´ Libra (Spica)

15. Svati                        6°40´ Libra-20° Libra (Arturo)

16. Vishakha                  20° Libra-3°20´ Scorpio (Zubemubi)

17. Anuradha                3°20´ Scorpio-16°40´ Scorpio (Scorpio)

18. Jyeshtha                   16°40´ Scorpio-0° Sagitario (Antares)

19. Mula                        0° Sagitario-13°20´ Sagitario (Shawla)

20. Purvashadya           13°20´ Sagitario-26°40´ Sagit. (Kaus Aust.)

21. Uttrashadya            26°40´ Sagit.-10° Capricornio (Nunki)

22. Shravana                 10° Capricornio-23°20´Capric. (Altair)

23. Dhanishtha              23°20´Capric.-6°40´ Acuario (Delfín)

24. Shatbisha                 6°40´ Acuario-20° Acuario (Acuario)

25. Purvaphadrapada   20° Acuario-3°20´ Piscis (Pegaso)

26. Uttraphadrapada    3°20´ Piscis-16°40´ Piscis (Pegaso)

27. Revati                      16°40´ Piscis-0° Aries (Piscis)

         (Fuentes: Ronnie Gale Dreyer. Indian astrology. A Western approach to the ancient Hindu art. Cap. 8, pág. 206; Dr. L. R. Chawdhri. Secrets of astrology based on hindu astrology. Sterling Publishers Private Limited. New Delhi, 1994, págs. 7-10).

         El sistema de mansiones chino y árabe consta de 28 asterismos, de hecho los intercambios culturales hicieron que entre los siglos VI y XI algunos autores indios adoptasen este último sistema; de todos modos hay discrepancias también en la naturaleza de algunas mansiones, el modo de atribuirles las cualidades, etc., cosa que, por otra parte, no ha de resultar extraña en absoluto.

         Tal vez la mansión más importante por su relación con las lluvias sea la cuarta, Roihni (la vaca roja), nuestras Pléyades (aunque según algunos autores, como indica la denominación, se trata de la estrella roja Aldebarán); la idea, la constatación, o, la creencia, llegó en Europa hasta, al menos, nuestro siglo XVII:

         También se tiene experimentado que, cuando fuese alguna lunación lluviosa, comúnmente acontece la mayor lluvia cuando la Luna pasa por las Pléyades).

         [Fuente: Antonio de Nájera. Summa astrologica y arte para enseñar hazer pronósticos de los tiempos. Lisboa, 1632.]

Los meses indios están basados igualmente en la cronología lunar; para lo que sigue, damos los términos de los mismos, la equivalencia solar occidental y la posición del Sol en la mansión lunar correspondiente:

Signo                            Fechas                Mes indio            Posición del Sol

Aries                              21 III-21 IV          Vaisakha              Vaisakha

Tauro                             22 IV-20 V           Jesth                    Jyestha

Géminis                          21 V-21 VI           Asar                     Purva Asadha

Cáncer                           22 VI-22 VII         Sarvana               Sarvana

Leo                                23 VII-23 VIII       Bhadra                Purva Bhadra

Virgo                             24 VIII-23 IX        Aswij                    Aswini

Libra                              24 IX-23 X           Kartik                   Kartika

Escorpión                      24 X-22 XI           Maghsar              Mrigasira o Aridra

Sagitario                         23 XI-21 XII         Pausa                  Pushyami

Capricornio                    22 XII-19 I            Magh                   Magha

Acuario                          20 I-18 II              Phagun                Phalguni   

Piscis                            19 II-20 III           Citra                    Citra

 

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